miércoles, 6 de enero de 2010

Sobre Avatar (J. Cameron, 2009)





Recomiendo sinceramente el visionado de esta película. 


Lo normal es que acudamos pensando en que merecerá la pena sólo por ver cuáles son todos esos avances en el campo de la postproducción. Tanto bombo se le ha dado a sus efectos digitales que resulta difícil no albergar un mínimo de curiosidad. Al mismo tiempo, uno ya se empieza a imaginar que la historia con toda probabilidad sea una castaña. 


En mi opinión, el interés de esta película está justo en lo contrario. Antes que en su tecnología me quedo con su guión y no por cómo esté construido, porque efectivamente su estructura es bastante floja, sino por los mensajes que lanza. 


Avatar es una peli militarista que justifica el uso de la acción bélica como forma de resolver conflictos. Por otro lado, es un canto a la enajenación del ser humano a favor de un mundo tecnificado. El ser humano original es un marine paralítico que sólo encuentra un habitat posible para vivir en un mundo virtual que le dota de nuevos atributos no humanos. Ese nuevo mundo juega con el mito del regreso a una conexión idílica en lo comunitario y con la naturaleza. Algo así como un paraíso perdido que, insisto, sólo se encuentra alejándonos de nuestra "realidad" y entrando en el mundo virtual. 


¿Serán estos los mensajes que nos lanza la posmodernidad? ¿Será facebook también una especie de mundo-avatar?